lunes, 10 de septiembre de 2012

Empieza el cole

Hoy han comenzado mis filios, y tropecientos niños más, je, el colegio. Como era de prever, un día duro para el niño, y feliz para la niña. Mi hijo nada más levantarse ha preguntado angustiado ¿y hoy mandarán deberes?. Para colmo, pasa a tercero de primaria lo que implica cambio de profe y vuelven a hacer grupos de alumnos distintos, bien, pues no le ha tocado con sus mejores amigos ni la profe que él quería…  Les ha llevado el padre, que tiene más flexibilidad de horario que yo, y dice que cuando ha visto las listas se le ha escapado una lagrimilla pero que ha disimulado. Pobrecillo, qué ganas tengo de verle y darle un par de achuchones. Lo de las reagrupaciones de alumnos cada dos años no lo acabo de entender, igual es por puro desconocimiento de causa y alguna de vosotras tenéis una opinión más formada. Pero a mi creo que no me habría gustado ir cambiando de compañeros cada dos años, por el contrario yo me pasé toda la EGB con C.R y V.R sentadas delante y detrás de mi, respectivamente, y como mejores amigas durante todos esos años.
Justo ayer dejé una opinión en un blog que comentaba sobre el comedor escolar y yo decía que en mi caso no puedo elegir porque por mi trabajo es imposible otra opción que no sea el comedor, pero que en un mundo ideal me gustaría que comieran en casa. Pues ale, por bocazas, me llaman del cole, para decirme que hoy no hay comedor – justo lo contrario que me habían dicho cuando llamé a confirmar la semana pasada - . ¿Que te gusta que coman en casa maja? ¡No digas más, que ahora mismito te los mandamos para allá! O_O ¡todo el día buscando apaños poramordedios!!! …cansino que es esto…
Volviendo al tema del comedor escolar, está claro que para muchísimas familias, incluida la mía, no es solo una opción sino una necesidad. Además yo estoy contenta con el nuestro, aunque como todo tiene sus inconvenientes, en mi caso el principal es el tema de las normas de educación en la mesa… fue empezar a comer en el comedor, y Asterix y Obelix eran unos finolis al lado de mis hijos. Por más que me desgañito en las cenas, ya tienen querencia a limpiarse con la manga, coger mal los cubiertos, eso cuando hay suerte y los cogen, porque la tendencia natural es a echar la mano. Mi madre era muy estricta con las normas de educación en la mesa, con lo cual yo soy muy sensible a la mala educación en ella, así que con mis hijos sufro amig@s, sufro. Otra pega que tiene en mi caso, es que mi hijo se ceba. Ya se que es un rara avis total, y que es más común que en el comedor coman poco. Bueno pues no, el mío se receba, y a tenor del tamaño y delgadez de su amigo compañero de mesa en el comedor, podría asegurar que se come su bandeja y la del amigo menudín que le acompaña. Aparte de que el gremio de los cocineros es un gremio que tiene conquistado desde siempre. Como es comilón y agradecido se los gana a todos. Yo cuando veo una señora por el barrio que le da un abrazo, ya se que es una cocinera del cole. Les alaba tanto las comidas, que ellas le ponen el plato con montañita y le dejan repetir. A ver, yo en el fondo las entiendo, un comedor lleno de niños guarreando con la comida, y te llega mi S. con sonrisa de oreja a oreja a decirte lo rico que está el cocido, y le ponen con copete y le hacen la ola si es menester.
En cualquier caso, ahora el debate en España más que comedor sí - comedor no, es el tema del tupper, al que muchas familias que están sufriendo la crisis de forma más dura, están teniendo que recurrir.  No se si habéis visto la noticia de hoy de una madre que le ha lanzado un tupper a Esperanza Aguirre.
Eso para mí sería la última opción (me refiero a usar el tupper para el cole, pero también aplica a lanzarlo), porque yo lo de comer en casa lo asocio a pasar un rato agradable juntos, comiendo comida recién hecha, en casa, con tu mantel, con los aliños necesarios a mano, charlando y aprendiendo de nosotros y de las normas de educación en la mesa. Pero tener que currarte diariamente un menú bueno para los niños, pero que sea comible al día siguiente, y ni siquiera comerlo junticos… uff, lógicamente si no me quedara otra opción lo haría, pero mientras tenga la suerte de poderme permitir otra opción solo puedo decir: bendito comedor escolar.
Y para rematar esta entradita le voy a dar un giro de temática de 180º y os voy a hablar de mis últimas lecturas. Acabo de terminar Aurora Boreal de Asa Larsson, novela negra sueca, que me ha gustado claramente más que las de Camila Lackberg, pero engancha menos que la saga de Stieg Larsson. Y acabo de empezar “El abuelo que saltó por la ventana y se largó”, de Jonas Jonasson, me está encantando es como Eduardo Mendoza en sueco. Muy divertida y absurda a la vez. Me da la risa solo de pensar las situaciones tan surrealistas que se producen y la forma de narrarlas. Ah! Se me olvidaba, este viernes fuimos a la Biblioteca con los niños y conseguí un libro que tenía pendiente y que recomendó Mo en su blog, Mecanoscrito del segundo origen, así que me lo leeré también, ya te contaré Mo!.

Besos y sed felices.

16 comentarios:

  1. A mi también me cambiaban cada 2 años, pero a partir de 5º (en el colegio alemán, me fui en 8º). A mi si me gustó, a veces tras unos años hay relaciones algo "vicidadas" (el típico con el que te llevas mal y le llevas viendo 4 años) y viene bien separarse. Además, como conservábamos amigos de otras clases, al final acabábamos haciendo una pandilla enorme. En 7º también me separaron de mis amigas de toda la vida y bueno, raro al principio, pero genial al final.

    El libro de Asa Larson también me encantó. :-)

    Besos!

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    1. Es cierto que mi hija que ya pasó por lo de la mezcla, ha mantenido a las mejores amigas del curso anterior y ha incorporado nuevas. Así que entre tu comentario y el de Inma, pues mira, me habéis aportado otro punto de vista interesante.
      Besos!

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  2. Uoooo, qué guay que hayas encontrado el libro, ya me dirás!
    Sobre lo de reagrupación de grupos, a mí tampoco me mola, no sé si aquí se hace mucho, no lo había oído (pero estoy muy out de temas escolares a esa edad...).
    Lo de comedor, yo preferiría que comiese en casa, pero es inviable con mi horario...
    Por otra parte, Matt, el viernes o sábado te envié un correo, lo has recibido?? Es importante, una cosa del blog y necesito respuesta urgentemente! Si no lo has recibido escríbeme un mail o déjame un mensa en el blog y te lo reenvío, ok? Dime algo pronto, please!
    Muas!

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    1. Contestado Mo, y perdona el retraso!!, no lo había visto.
      Besos

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  3. Mi respuesta es: en EGB en mi clase había una panda de gilipollas de no te menees y en la clase de mi amiga Isa había gente majísima. Lo hubiera dado todo porque mezclaran las clases cada año. Y en mi caso 8 años la misma niña siendo la tímida de la clase, el mismo niño siendo el tonto de la clase, el mismo niño siendo el gamberro. Mismo ambiente, mismo rol. Yo voto por la mezcla. En el cole de mis hijos cambian todos los años.

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    1. jaaajajaja, ves?, pues ya me aportas otro punto de vista para entender el tema. Efectivamente tiene todo el sentido que en el mismo ambiente se afianzen roles que en otros no se darían tan marcados (el gamberro, el plasta, el tímido...).
      No me lo había planteado así, sino solo a través de mis propios ojos suertudos, porque ya es potra que ordenando las clase por orden alfabético de apellidos, delante y detrás me tocaran dos chicas majísimas, que siguen siendolo.
      Besos

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    2. Me alegro!! Y te digo que a mi hijo el año pasado le separaron de sus amigos y le viino genial para centrarse y de paso hacer otros nuevos

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  4. Tema tuper: No me afecta, mi hija ya es mayorcita, no trabajo, y por lo tanto a casa, pero no hay derecho, en su instituto nos avisan este año: Precio menú 6 euros y medio, precio si llevas el tuper tres euros. Vayanse ustedes a la mierda señores míos ¿Que me quieren vender? 3 euros más poner yo la comida más el tiempo termina saliéndome por lo mismo, así que no me vendan que están ofreciendo opciones porque no es así, le debo un post al tema pero me pone de tan mala baba que lo voy dejando.

    En dos días se han acostumbrado a la rutina Matt, no hace falta que yo te lo diga.

    Muchos besos

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    1. Sí, los niños se acostumbran rápido. Hoy es el segundo día y el niño ya iba contento.
      En cuanto al tema tupper y comedor escolar, dolega tiene alguna entrada al respecto, que me parecen super acertadas. Hay que ser más reinvindicativo e incluso creativo, para buscar soluciones cuando lo que te ofrecen no es válido.
      Besos!!

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  5. ¡Qué mal lo de las reagrupaciones! No conocía éso, pero no me hubiera gustado que me tocara. He ido a clase con mi mejor amiga, Virginia, toda la vida y hubiera sido un trauma que nos cambiasen.

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    1. A mi me habría pasado igual, pero mira el comentario de Inma, que lleva razón en lo que dice. Como siempre, cada uno cuenta la feria según le va, pero de cara a dar soluciones globales, supongo que este de las reagrupaciones puede que tenga más ventajas que inconvenientes.
      Besos!!

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  6. Pues yo creo que tuve las mismas compañeras (mi cole era sólo de niñas) desde que empecé hasta que me fui al instituto. En el cole siempre fui al comedor y la verdad es que lo detestaba pero sí es cierto que hay veces en que no hay más remedio. Me apunto lo del abuelo que saltó por la ventana. Es decirme "surrealismo" y me hacen los ojos chiribitas. Jajaja. De "Aurora Boreal" me han hablado muy bien, aunque no lo he leído y de Camilla Lackberg leí "La princesa de hielo" (creo recordar que se llama así) y la verdad es que me gustó. Un besote!!!

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    1. Uy sí, el del abuelo creo que te va a gustar. No llevo mucho del libro pero la temática es de partirse.
      Besos!

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  7. Prefiero la mezcla. Todos los años con los mismos compañeros genera grupitos que luego en la adolescencia se convierten en grupos muy cerrados.
    Lo del Tupperwere ya sabes que postee sobre ello hace unas semanas.
    Yo me crié sin comedores escolares, ni podía comer en casa así que soy hija total del twpperwere que mi madre me hacía por las mañanas y yo comía a mediodia.
    Mis hijos son niños de comedor escolar y de metodo alternativo que conté en su día en el post que hice, cuando nos hartamos de que nos tomaran el pelo.
    Creo que tenemos que buscar alternativas a las cosas y que tendemos al inmovilismo.
    Todo lo nuevo nos da miedo y nos negamos por defecto.
    El precio del servicio tendrán que negociarlo los padres y ver como llegar a un acuerdo.
    Besazo

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    1. Me encantó tu entrada sobre la solución al comedor escolar que disteis en el cole de tus hijos. De hecho, me parece como increible, se debieron alinear una serie de astros y madres para obrar el milagro!.
      Besos

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  8. Pues yo que he sido una niña tímida, me hubieran hecho una buena faena si cada dos años me cambiaban de clase y vuelta a empezar. Ya me costó bastante la adaptación en el instituto. Pero bueno, mirándolo en la distancia, y leyendo algunos comentarios, seguro que algo de positivo tiene.
    Lo del tupper también estoy escandalizada y eso que a mi no me toca, jejej.
    Me apunto ese del abuelo, me había llamado la atención el título, pero no me atrevía por si fuera una basura.
    Un besito.

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