lunes, 21 de enero de 2013

Infertilidad

A raíz de una entrada que leí la semana pasada y que llevaba por título una enfermedad que viví en primera persona, me he dado cuenta de que todavía no he contado nunca esta experiencia. Sigo a blogueras, como Trax o Alpaca, que luchan como jabatas por conseguir su sueño de la maternidad, y nunca las he contado mi caso, imperdonable. Así que le pongo remedio ahorita mismo. Esta historia se remonta a 14 años atrás.

Tenía yo 25 años, un novio estudiante de ingeniería, un absorbente trabajo en el mundo de la consultoría y ningún pensamiento todavía de tener hijos, cuando empecé con dolores muy fuertes de tripa.
No sé exactamente cuantos meses dejé pasar antes de ir al médico, porque mi técnica siempre es esperar a ver si las dolencias se curan solas. Además tengo mucha tolerancia al dolor físico, con lo cual, cualquiera sabe. Solo se que un día por fin fui al ginecólogo que más cerca de casa me coincidía, me mandó unas pruebas, y allí empezó una sucesión de fatídicas desgracias.
El primero que lo bordó fue el ecógrafo que empezó a decirme, como regañándome que menudo quiste enorme tenía, que eso había que extirparlo ya mismo. Imaginaros la escena, 25 añitos, sola en la consulta que aproveché al medio día para poder volver deprisa al trabajo. Me recuerdo saliendo de esa consulta con un temblor de piernas que casi me caigo al suelo.
Después abrí unos resultados de una analítica y marcadores, antes de llevarlos al médico, yo solita interpreté los resultados y di por seguro que aquello era cáncer.
Posteriormente en el ginecólogo me dieron el diagnóstico: quistes por endometriosis. Uno de los quistes era muy grande y la doctora me dijo que probablemente me tendrían que “vaciar” (ovarios y útero) para quitármelo, que era una pena por mi edad.
Una vez más imaginaros: 25 años y sola en la consulta. Salí de allí llorando y me fui directa a casa de mis padres, a los que todavía no había comentado nada del tema para no preocuparles antes de tiempo, porque la verdad es que pensaba que todo se iba a solucionar en cualquier momento. Primero me regañaron por no haber contado nada antes, y después mi padre se puso a llamar a varios amigos médicos, que después de unas gestiones, le recomendaron un equipo pionero en endometriosis y de los que les dieron unas referencias estupendas.
Desde ese momento la cosa mejoró un poco, pero en cualquier caso, este nuevo equipo al que me dirigí, me explicó que la endometriosis es una de las principales causas de infertilidad en la mujer. Las células del endometrio se salen del endometrio que rodea al útero, y pueden acabar en cualquier parte del cuerpo. Cada mes menstrúan y crecen, por lo que los quistes de endometriosis pueden alcanzar grandes tamaños. Sin ser malignos, os podéis imaginar el estropicio que generan allí donde se aposentan. Estos médicos eran de los pocos en ese momento que operaban cualquier quiste por grande que fuera con laparoscopia, ya que esta técnica les permitía observar bien toda la zona y asegurarse de que no había células de endometrio diseminadas por otros sitios. Muchas veces no se ven en la ecografía, pero si están ahí, crecerán y se convertirán en quistes. Me explicaron todo con mucho detalle, y con realismo: lo tenía muy difícil para tener hijos en un futuro. En uno de los dos ovarios tenía un quiste de 8 cm, por lo que ya me dijeron que seguramente ese ovario lo perdería. En el otro ovario tenía un quiste de 3 cm, dependiendo de cómo de agarrado estuviera se podría salvar entero o no. Las trompas de Falopio había que comprobar si estaban limpias, porque con endometriosis era posible que también estuvieran afectadas… Un panorama.
Me operaron y me quitaron además de los dos quistes que se veían, otro del intestino. Lo sorprendente fue que solo perdí medio ovario. Las trompas y todo lo demás quedaron en perfecto estado. Después tuve un tratamiento de 6 meses con inyecciones de hormonas que me provocó una menopausia. Y después de eso, revisiones cada seis meses para confirmar que todo había quedado bien, porque la endometriosis es muy recurrente.
Ahora viene lo bueno: nunca más he vuelto a tener quistes de endometriosis, y con 29 años pude quedarme embarazada sin ningún problema.
A pesar de ello, durante 4 años viví con el miedo a no poder tener hijos, a que se me reprodujeran los quistes, a que me tuvieran que volver a operar y no tuviera tanta suerte como la primera vez.
Una vez que terminó todo el tratamiento y revisiones, y el ingeniero terminó la carrera, nos casamos y desde ese mismo día intentamos ser padres. Cada mes que no conseguía quedarme embarazada tenía más claro que era, como me anticiparon en su momento, un problema de infertilidad debido a mi endometriosis.
No fue así. Tuve mucha suerte.

Sin embargo se lo que es el dolor de pensar que no vas a poder tener hijos (biológicos).

De todas formas, en esos años “fatídicos” de diagnóstico-operación-tratamiento decidí que sería madre, aunque no fuera de la forma natural, habría adoptado.

Os deseo de todo corazón a las que estáis intentando ser madres, que tengáis tanta suerte como tuve yo. No me imagino mi vida sin mis hijos.

P.D.: Trax, Alpaca, esta entrada os la dedico a vosotras.

29 comentarios:

  1. Yo también tuve un problema ginecológico y me dijeron que me tenían que quitar un ovario. Afortunadamente no fue tan grave. Un beso.

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    1. Gracias a Dios muchas veces acaba siendo menos de lo que en un primer momento, dicen los médicos.
      Un beso

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  2. Y ahora me tienes aquí lagrimeando!!
    Gracias por pensar en mi. Ojalá mi final sea así de feliz. Aunque no he sufrido endiometrosis, sé que es muy doloroso.
    Pero ahora ya tenemos en común el dolor de pensar que quizá no pueda ser madre.
    Aunque pelearé con uñas y dientes para serlo, de una manera o de otra o ambas!
    Un beso fuerte

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    1. Guapa!!! no lagrimees mujer! Ojala tú también tengas tu final feliz, de una manera o de otra. Sigue peleando por ello.
      ...Y sí, la endometriosis es muy dolorosa, pero yo soy más burra que un arao, tenía que haber ido antes al médico, y no cuando ya tenía 3 quistes enormes y un dolor...

      Un beso muy fuerte

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  3. Brff nena, que se me ha puesto un nudo en la garganta y porque estoy en el trabajo que si no se me abría el grifo...

    Mil gracias por contarnos esta experiencia. Ojalá no te hubiese pasado de todos modos, pero mira...a veces piensas que las cosas no van a poder ser y la vida te sorprende, porque dicen que la vida siempre se intenta abrir paso.

    Muchas gracias guapa...desde luego yo no he pasado tantos tratamientos como nuestras compis, es decir, ni uno aún, pero sí, es difícil a veces. Aunque yo no pierdo la esperanza y menos con personas como tú acompañándome.

    Me encanta esta familia bloggera

    Gracias gracias mil gracias

    Moaaagsssff

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    1. De nada Alpaca. Haces bien en no perder la esperanza. Como dices la vida se abre paso, y hay mil casos esperanzadores como el mío, en el que los negativos vaticinios médicos no se han cumplido.
      Mil besos

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  4. Buffff yo también viví algo muy similar a lo que nos acabas de contar, tenía 21 años, un dolor pélvico insoportable, casi continuo y buen día me di cuenta de que algo crecía en mi interior y no era precisamente un bebé. Aguanté mucho, varios meses, hasta que no pude más y fui por urgencias, me operaron a los 10 días, tenía varios endometriomas, uno de ellos de más de 12 cm, que llegaba al intestino y pesaba más de 1 kg. También tuve tratamiento con análogos durante 6 meses, fue en verano y lo pasé fatal.
    Nunca me he puesto en la tarea de tener hijos, por motivos que aquí no vienen al caso, pero sé que lo tendría muy difícil, la única trompa que tengo está afectada por la endometriosis. Después de esa primera operación vino otra, 10 años después, para ver cómo estaba todo y eliminar algún foco.
    Yo tampoco suelo contar mi historia, pero sigo a Trax y a Alpaca y sé que yo muy probablemente tendría que pasar por algo similar si me pusiese con el tema.
    Un beso y gracias por contar tu historia

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    1. vaya Nuria, pues sí que se parecen nuestras historias. Muchas gracias por contarlo. A mí no me gusta hablar de lo que pasé. Además, es que ya lo tengo como olvidado, es como si pasara en una vida anterior.
      Nunca se sabe lo que te costaría tener hijos, porque a mí me dijeron que lo tenía dificilísimo. Y que tenía todas las probabilidades de volverse a reproducir, y no tener tanta suerte la siguiente... Y mírame!! aquí estoy tan feliz con mis dos pequeños. Muchos besos Nuria

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  5. Bueno, vaya aventuras. Desde luego el afán de ser madre se agarra en nosotras y no hay quien nos pare. Me alegro de que tu historia tenga un final feliz. Yo no he estado en una de esas, aunque pensé que me quedaría sólo con un hijo y sufrí mucho durante mis dos pérdidas gestacionales este año.
    Sin embargo, se obró el milagro y ya estamos esperando a la nena. Una respira con alivio tras cada ecografía, aún.
    Espero, como tú, que Alpaca y Trax consigan su sueño también dentro de poco, porque serán maravillosas madres.

    Besos.

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    1. Espero que todo vaya bien en este embarazo tan deseado y dentro de poco tengas a tu nena en brazos.
      Besos!

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  6. Muchas gracias por compartirlo Matt, seguro que dará fuerzas a más de una mujer. Y me alegro de que se solucionase tan bien en tu caso.
    Un besote.

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    1. Gracias Mo. Lo mío es un caso de esperanza. No hay que ponerse siempre en lo peor, a veces la estadística se equivoca.
      Besos!!

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  7. Me he enternecido, sobre todo porque las leo y me duele cuando sufren. Me parece muy bonito que lo compartas, seguro que se sienten mucho mejor viendo que las entiendes.
    Yo soy de las de ir al médico cuánto más tarde y sé que no es bueno. Tuviste mucha suerte, me alegro.

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  8. Que interesante lo que contas!! Ojalá que todas las chicas que andan en la busqueda tengan suerte como vos y superen el problemita..
    beso

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  9. Ufff! durillo, durillo, a cualquier edad, pero siendo tan joven y con el miedo a no poder tener hijos mucho más.

    A mí me operaron de un adenocarcinoma en el cuello del útero, y me dejaron sin cuello, luego me dio por salirme quistes en los ovarios, que por suerte aparecían y se disolvían solos, pero me volvían loca hormonalmente y me producían dolores horrorosos, ahora hace tiempo que no me sucede. Por suerte todo esto ocurrió hace ya años pero con mi hija ya nacida, si al miedo que pasé le tengo que añadir la preocupación de la infertilidad me da algo. Me dijeron que en teoría no había problemas para quedarme embarazada si lo deseaba pero que no se sabría a ciencia cierta hasta que no lo probara, como no era mi intención tener más bebes, pues ahí quedó la cosa.
    Besos Matt y gracias por compartir.

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    1. vaya, así que tú también has tenido problemas ginecológicos... al final, pocas se libran, es un horror.
      Besos!

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  10. Tiene que haber sido muy chungo pero lo bueno es que ahora puedes dar este mensaje tan positivo a las babyhunters. Nada es imposible en esta vida. De una u otra forma todas cumplirán su sueño. Un besote!!!

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    1. Efectivamente, el mío es un mensaje positivo.
      Besos!

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  11. MATT:
    Guapa, he queddo impresionada con tu historia!!!. Me alegro muchísimo que torcieras la mano al destino y que ahora seas la feliz mamá que eres, que es lo más bello.
    En fin, que a algunas nos toca difícil (a mi también me costó dos años y medio, lograr mi sueño), pero nada es imposible.
    Un besito!!!!

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    1. Nosotras hemos tenido suerte. Ojala siempre acabará bien la bùsqueda. Besos!

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  12. Una buena historia con final feliz. Me alegro un montón por ti... a ver si las blogueras que estan buscando tienen tanta suerte como tu, se lo merecen!!!

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  13. Matt, muchas gracias por contar tu caso, con final feliz.

    Yo llevo ya casi 4 años intentando darle un hermanito a la rubia, y también he pasado por una operación de endometriosis. En principio, está controlado y no me han salido más quistes, pero en mi caso se une el problema de mis óvulos viejos y escasos...

    Sé lo que es pasar por esta lucha, y si ya con un hijo, se hace muy dura, no teniéndolos debe ser horrible. Sé que en el fondo soy una afortunada.

    Espero que estas dos chicas consigan su objetivo pronto.
    Ninguna mujer debería pasar por esa angustia.

    Bs.

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    1. Ya he visto que hoy escribes en tu blog sobre tu experiencia. Muy dura, aunque ya tengas una hija, tu deseo de ser madre de nuevo sigue ahí pendiente... Ojala lo consigas.
      Besos

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  14. Que historia! Me alegro por el final feliz, yo todavía no empecé a buscar un hijo... pero siempre me preocupo la fertilidad... veremos cuando llegue el momento.
    Gracias por el relato.

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  15. Ya estoy por aquí, gracias por compartir tu historia, siempre vienen bien para subir la moral! si tu puedes, yo puedo!! o eso esperamos!
    feliz semana, besotes

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  16. Hay matt, qué mal se pasa, verdad? Un besete nena

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